Las ondas de choque son una terapia largamente administrada en disciplinas como la Medicina o la Fisioterapia. Sin embargo, su aplicación en Medicina Estética es relativamente reciente, motivo por el que aún no es un tratamiento tan popular como la mesoterapia o la carboxiterapia.
¿Qué son las ondas de choque?
Las ondas de choque son ondas acústicas de pulso único que alcanzan un pico de presión muy alto en muy poco tiempo.
Tienen la capacidad de propagarse por los tejidos y su efecto mecánico produce una cascada de beneficios en las estructuras tisulares:
- Activan el núcleo celular e inducen la generación de factores de crecimiento
- Favorecen la angiogénesis o formación de nuevos vasos sanguíneos
- Favorecen la permeabilidad de la membrana celular
- Estimulan el metabolismo de las células grasas
- Estimulan el sistema linfático
Estos efectos producen, a su vez, otros beneficios que actúan sobre las causas de la celulitis:
- La generación de factores de crecimiento favorece la regeneración de la piel
- Los nuevos vasos sanguíneos mejoran la microcirculación de la zona, deteniendo así el círculo vicioso de la celulitis
- La permeabilidad de la membrana celular permite liberar los ácidos grasos de los adipocitos, lo que reduce los abultamientos propios de la celulitis
- La estimulación del sistema linfático ayuda a eliminar líquidos y toxinas
¿Cuáles son las indicaciones de las ondas de choque?
La terapia con ondas de choque está indicada en el tratamiento de reducción de la celulitis. No es un tratamiento para perder peso ni acúmulos de grasa localizada.
Está contraindicada en los siguientes casos:
Está contraindicada en los siguientes casos:
- Marcapasos.
- Embarazo.
- Infecciones o tumores en la zona a tratar.
- Problemas de coagulación.
¿Qué beneficios producen las ondas de choque?
Además de la ruptura de los septos fibrosos, la vibración que provocan las ondas de choque en los tejidos producen los siguientes beneficios:
- Estimulación del metabolismo de las células grasas.
- Inducción de la síntesis de colágeno y elastina.
- Formación de nuevos vasos sanguíneos.
- Fortalecimiento del tejido conjuntivo.
- Mejora de la circulación sanguínea y linfática.
- Regeneración de los tejidos.
- Los beneficios producidos por las ondas de choque mejoran el aspecto de la celulitis
¿Las ondas de choque son efectivas para todo tipo de celulitis?
Las ondas de choque obtienen mejores resultados en determinados tipos de celulitis, principalmente en la celulitis fibrosa , aunque también puede ser interesante aplicarlas en algunos casos de celulitis edematosa.
La celulitis fibrosa es un tipo de celulitis dura al tacto, que no se puede pellizcar y que puede resultar dolorosa. Presenta hoyuelos definidos y suele localizarse en glúteos, cartucheras y muslos.
La celulitis edematosa es viscosa al tacto y presenta un aspecto de piel acolchada, que suele estar vinculada a la retención de líquidos.
Para determinar si las ondas de choque son el tratamiento más adecuado para cada caso, es imprescindible un buen diagnóstico del tipo de celulitis que presenta cada paciente, así como de otros problemas estéticos asociados, como pueden ser la flacidez o la acumulación de grasa localizada.
Además del diagnóstico preciso, en Depilcare elaboramos un protocolo personalizado para cada paciente , que suele combinar distintas técnicas compatibles entre sí cuyas sinergias optimizan los resultados. Así, en la celulitis fibrosa puede ser interesante combinar las ondas de choque con las infiltraciones de mesoterapia y/o carboxiterapia, que reforzarán el efecto lipolítico y mejorarán la microcirculación sanguínea, respectivamente.
La celulitis fibrosa o dura suele localizarse en glúteos, muslos y cartucheras
¿Cómo actúan las ondas de choque en la celulitis?
En la celulitis, las células grasas se agrupan en lóbulos separados por unos filamentos llamados septos fibrosos. Cuando las células grasas aumentan, éstas protruyen hacia el exterior, mientras que los septos fibrosos tiran hacia dentro, formando así la irregularidad de la piel tan característica de la celulitis, conocida como piel de naranja o relieve capitoné.
Las ondas de choque favorecen la reducción de los nódulos de grasa ubicados entre los septos fibrosos, por lo que reduce los hoyuelos ymejora el aspecto de la piel.
La mejora de la microcirculación sanguínea y del drenaje linfático favorecen la eliminación de las grasas y toxinas acumuladas. Los factores de crecimiento y el colágeno aportan firmeza a la piel.
Todo ello contribuye a un mejor aspecto y textura de la piel de naranja.
¿Cómo es la sesión de ondas de choque?
La sesión de ondas de choque es sencilla y no requiere ninguna preparación especial.
Las ondas de choque se aplican mediante un dispositivo cuya pieza de mano se desliza sobre la piel de la zona a tratar, previa aplicación de un gel conductor transparente.
La sesión puede tener una duración de entre 15 y 30 minutos, en función de la extensión de la zona tratada.
Después de la sesión, la paciente puede retomar inmediatamente su actividad profesional y social . No requiere ningún cuidado doméstico.
En función del tipo de celulitis y de su gravedad, pueden ser necesarias entre 8 y 10 sesiones, que se aplican con periodicidad semanal.
¿Qué resultados se obtienen con la terapia de ondas de choque?
Los resultados del tratamiento con ondas de choque son:
- Alisamiento de la piel de naranja , reduciendo los hoyuelos de la celulitis.
- Piel más firme.
- Piel más elástica.
Para obtener resultados visibles en la reducción de la celulitis suelen ser necesarias entre 8 y 10 sesiones, siempre según las necesidades específicas de cada paciente, que pueden aplicarse con un intervalo de 7 días.
Debido a que la celulitis es un problema crónico, para prolongar los resultados es recomendable realizar alguna sesión de mantenimiento cada 4 ó 6 meses, así como adoptar un estilo de vida saludable.
¿Qué tratamientos son compatibles y combinables con las ondas de choque?
Según el tipo y grado de celulitis que presente la paciente, las ondas de choque pueden combinarse con otras técnicas para optimizar los resultados:
- Mesoterapia y Carboxiterapia, en casos de celulitis rebelde.
- Presoterapia, en casos de retención de líquidos.
- Radiofrecuencia, en casos de celulitis con flacidez asociada.